Proyecto «Composition Collaboration» Inspira a escolares a explorar la música
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Una iniciativa innovadora está transformando las aulas de tercer grado del Distrito Escolar Unificado de Prescott (PUSD). El programa Composition Collaboration (Colaboración en Composición), que arrancó el 3 de febrero, está llevando la magia de la música y la creación artística a los estudiantes de las escuelas primarias Taylor Hicks y Lincoln y Abia Judd.
Financiado por la Beca J.S. Acker Trust y la Ciudad de Prescott, este programa no solo proporciona flautas para las aulas, sino que también entrega un instrumento a cada estudiante para que lo conserve como suyo. “Estoy muy emocionada con este programa”, expresó María, una de las instructoras. “Esta coalición ya está trabajando para adquirir juegos de flautas para cuarto grado y flautas individuales para los nuevos estudiantes de tercer grado que se integren al PUSD. La alegría en los rostros de los niños al recibir su flauta para llevar a casa es indescriptible”.
Preparando el terreno para el éxito musical
Antes de que Henry y María, los instructores del programa, comiencen sus sesiones, los profesores de música del PUSD enseñan a los estudiantes los fundamentos musicales. Esto incluye conceptos como tono, ritmo, pulso constante, tempo y cómo cuidar y producir un sonido claro con la flauta. Para cuando Henry y María llegan, los estudiantes ya dominan las notas B, A y G.
La enseñanza de la composición comienza de inmediato. Los estudiantes analizan piezas musicales famosas utilizadas en escenas de dibujos animados, lo que les ayuda a entender cómo los compositores usan elementos musicales para crear imágenes y evocar emociones.
Un enfoque colaborativo y dinámico
El proceso de composición es rápido y altamente participativo. Los estudiantes trabajan en equipo para usar elementos musicales y expresar emociones a través del sonido. “Henry anota las ideas musicales de los estudiantes en una partitura orquestal usando una computadora, la cual se proyecta en una pantalla grande para que todos puedan seguir el progreso”, explicó María. “Hacemos preguntas abiertas para conocer sus preferencias y les recordamos que todas las opiniones cuentan. Para el final de la primera clase, los estudiantes ya están cantando las melodías que imaginan. A veces, su nivel de comprensión es tan profundo que me emociona hasta las lágrimas”, agregó.
Un gran final junto a la Orquesta Filarmónica de Arizona
En solo tres sesiones, las ocho clases participantes habrán creado sus propias piezas musicales. Estas composiciones servirán como base para una obra más grande que Henry y María armarán. El programa culminará el 25 de abril con una presentación especial en el Teatro Ruth Street del PUSD, donde los estudiantes tocarán sus creaciones con sus flautas, acompañados por músicos de la Orquesta Filarmónica de Arizona.
Un legado que perdura
El impacto de este programa va más allá del aula. Dos años después, en quinto grado, los estudiantes tendrán la opción de elegir banda, orquesta o coro como materia optativa. El número de inscripciones en estas clases este año ya ha sido registrado y se comparará con las cifras de dentro de dos años para medir el impacto a largo plazo del programa.
María compartió que ella y Henry a menudo escuchan a los estudiantes hablar con entusiasmo sobre lo que significa para ellos la música que han creado. “También observamos su lenguaje corporal”, añadió. “El año pasado, los estudiantes de tercer grado de Flagstaff escucharon su composición interpretada en vivo por la Orquesta Sinfónica de Flagstaff y estaban tan felices que casi bailaban”.
El programa Composition Collaboration no solo enseña a los estudiantes a tocar música, sino que los inspira a crear, colaborar y conectarse con el poder transformador de la música, dejando una huella que perdurará por años.