Los peligros de cruzar la frontera por el desierto
Es importante pensar con sumo cuidado todos los riesgos de cruzar la frontera por el desierto. No es, de ninguna manera, un lugar amigable con la vida humana. Durante el 2022 murieron en su intento de cruce más de 800 personas, a lo largo de la frontera suroeste de Estados Unidos, de acuerdo con información del Departamento de Seguridad Interna.
Algunos de esos casos fueron de personas ahogadas en el río Bravo o Grande, pero los decesos por causas relativas al calor extremo en el desierto entre Sonora y Arizona, son alarmantes.
Según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP por sus siglas en inglés), entre 2017 y 2021, 35% de las muertes registradas en la frontera entre México y Estados Unidos fueron causadas por la exposición al medio ambiente, particularmente al extremo calor de la zona desértica. Del total de migrantes fallecidos encontrados de lado estadounidense de la frontera, durante el mismo periodo, el 59% eran
hombres, el 11% mujeres y en el 30% de los casos, fue imposible identificar el sexo. Por otro lado, dos de cada cinco fueron personas menores 35 años. De ellas, la mitad fueron ciudadanos mexicanos. En Arizona, la Patrulla Fronteriza reportó que 360 de esos decesos ocurrieron en sus sectores de Yuma y Tucson.
A la crueldad del clima hay que sumarle factores humanos. Por ejemplo, se han reportado múltiples brigadas antinmigrantes. Además de acosar a los migrantes en su camino por el terreno desértico, estas brigadas sabotean los contenedores de agua que organizaciones locales de ayuda humanitaria colocan en las rutas más remotas del desierto de Sonora. Sin acceso al agua las posibilidades de sufrir deshidratación severa se multiplican.
Además, se debe considerar la posibilidad de encuentros con animales salvajes que son nativos del desierto, como la araña viuda negra, cuyo veneno es 15 veces más potente que el de una serpiente de cascabel; o el monstro de gila, un lagarto con una mordida extremadamente venenosa. Cualquier situación provocada por alguno de los ejemplos mencionados anteriormente puede resultar mortal en cuestión de horas.
La Patrulla Fronteriza ha instalado torres de rescate en sitios estratégicos en las rutas de cruce, esta es una alternativa para solicitar auxilio, en caso de que una persona se encuentre extraviada en el desierto y requiera asistencia médica. De contar con un teléfono celular, la recomendación es llamar al 911 para que personal especializado pueda establecer la ubicación de la persona y enviar asistencia.
Si se está tratando de localizar a un familiar directo, extraviado en su intento de cruce, es necesario llamar al CIAM, (Centro de Información y Asistencia a Mexicanos) al 520-623-7874, para que éste a su vez, realice el reporte correspondiente a las autoridades y grupos de rescate.