Cuando hablamos de cambiar una creencia conscientemente, una de las cosas más eficaces que podemos hacer es tomar consciencia de ella y de cómo se manifiesta en los hábitos subconscientes de nuestras rutinas diarias. Embarcarse en este camino, requiere estar atento a cuál es nuestra intención consciente en todo lo que hacemos a cada momento de nuestra vida. Si queremos identificar  cuáles son nuestras verdaderas creencias, basta con mirar el mundo que nos rodea para ver sus reflejos en nuestras relaciones, profesiones, abundancia y salud. Si deseamos mantener la esperanza de cambiar estas cosas, necesitamos un modo de trascender los límites de las creencias que las crearon. Y teniendo en cuenta que las creencias son programas, aquí es donde intervienen la fuerza de la lógica y la fuerza del corazón. Identifica la conducta que debes cambiar.  Te invito a usar la herramienta de la observación plena en este momento (Ahora) y reflexiona sobre estas dos fuerzas.

La fuerza de la lógica:

Podemos convencer a nuestra mente consciente de una nueva creencia por la fuerza de la lógica. En cuanto la mente vea una razón para pensar de manera diferente con respecto al mundo, permitirá que el corazón adopte esa posibilidad en forma de una nueva creencia, es decir, le permitirá sentir que es verdad.

La fuerza del corazón:

Podemos pasar por alto completamente la lógica de nuestra mente e ir directamente a nuestro corazón. De este modo, ni siquiera tenemos que pensar en que creemos. Nos vemos obligados a adoptar una nueva creencia en presencia de una experiencia que está más allá de la explicación racional. Esta es la definición de la fuerza del corazón. De modo que hablar del corazón estamos hablando del Amor incondicional, y para descubrir ese verdadero amor, la transformación interna debe ser absoluta. El silencio, la pureza en la mente y la inocencia necesitan estar integrados, son condiciones imprescindibles para que ese amor incondicional que ya está en nuestro interior, porque es lo que somos, se manifieste, lo sintamos y actué. El Amor va a expresarse en toda las direcciones a través de lo que somos y a través del reflejo, lo que creemos que es la realidad, no según las ideas que pueda tener de cómo debería ser el Amor. Lo que es, es. Te invito hacer una reflexión y hacer conciencia sobre que fuerza necesitas para seguir tu evolución hacia el cambio que mejor se adapte a ti. Recuerda, si no hacemos nada en el tiempo presente, el mañana continuara como hasta ahora. Sé el observador, observado y desde la atención plena podrás descubrir nuevos horizontes. Te doy las gracias por ser y estar. Si gustas más información al respecto no dudes en ponerte en contacto conmigo, muchas gracias. ¡Dios te bendiga!

Héctor Martínez

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