COLMILLO NEGRO
Por: Pepe Juárez
El animal tuvo una infancia muy complicada, su madre era golpeada por su pareja y en el bosque, todos los animales sufrían los efectos de la depredación de las especies mayores, sumándose a ello, la de los humanos, por lo que vivían estresados y el mínimo ruido los asustaba.
El lobo, al igual que su madre, era golpeado por su progenitor, para darle valor, generar coraje en él y no dejarse maltratar por los demás animales. Fue creciendo con carácter fuerte, al mismo tiempo desarrolló una conducta violenta lo que le sirvió para resolver sus problemas de caza y sobrevivencia por sus propios medios.
Su ferocidad, motivó a los animales para que le llamen Colmillo Negro, porque cuando atrapaba a las ovejas, sin piedad plantaba sus colmillos en el cuello de sus víctimas.
Los líderes de la jungla envejecían y Colmillo Negro, pensaba que en algún momento se convertiría en el jefe de todos, lo que le daría la facilidad para imponer su autoridad. Pero tenía que pasar por la aprobación de todos los animales, la mayoría eran ovejas. Cómo él se convertiría en jefe y daría órdenes, podría elegir a quien devorar, pues las ovejas eran más apetitosas y ellas se someten sin resistencia, pensaba y curiosamente tenía que convencerlas para que el día de la elección sus víctimas, lo elijan como su líder.
El viejo lobo líder, convocó a todos los animales que era parte del gobierno de la jungla y comunicó que debían relevarlo porque estaba trajinado y cansado. La tradición era que, entre todos los animales, el más fuerte de la jungla, debía elegirse para asumir el liderazgo y defenderlos de las otras bestias.
Ingresaron así al proceso eleccionario y los interesados tenían que anunciar su postulación a los animales y explicar las razones por las que querían asumir el liderazgo.
Fue la vizcacha la primera candidata, luego una leona, los elefantes no se quedaron atrás y presentaron su candidato, los tigres tuvieron su oportunidad de liderar y lo hicieron mal, por lo que decidieron no participar. Las ovejas eran la mayoría de la jungla y no presentaban candidato porque siempre eran las más débiles, Colmillo Negro lo sabía, por lo que tenía que ganárselas.
Por las noches se reunía con su equipo de campaña y les advirtió que no se coman a las ovejas hasta que logren que lo elijan como líder. “Ganamos el liderazgo y ese día nos damos el banquete de nuestras vidas, las ovejas tendrán que sacrificarse. Por el momento yo diré que si gano el liderazgo me convertiré en vegetariano”, expresó, arrancando una carcajada de los acompañantes, pues nadie le creía.
Llegó el día de las decisiones, todos los animales desde muy temprano salieron a la asamblea para elegir a su líder. Los candidatos salieron al frente en donde estaba el tribunal que dirigía la elección. Antes de la decisión de la asamblea, los postulantes presentaron las razones por las que querían ser líderes. Todos se comprometieron a cuidar la jungla y enfrentar cualquier detractor. Colmillo Negro llamó la atención señalando que debían confiar en él, porque iba a cuidar de todas las especies, “incluso les digo: me convertiré en vegetariano”, frase con la que terminó su discurso, generando un murmullo entre los concurrentes.
Pasado el mediodía, los animales fueron al momento de la decisión uno por uno fue votando y finalmente ganaron la primera vuelta el lobo y el elefante. Llegado el momento de la segunda votación, las ovejas fieles a la tradición, inclinaron la balanza a favor de Colmillo Negro, a quien le hicieron realidad su sueño y entre sí decía, lo logré y ahora es mi turno de hacer sufrir a estas ovejas tontas que votaron por mí.
Efectivamente el sueño de la protección y el respeto por las ovejas, se convirtió en pesadilla, ni bien asumió el liderazgo Colmillo Negro, no cumplió con sus promesas y empezó hacer lo contrario de lo que anunció en campaña. No se convirtió en vegetariano, sino que empezó a someter a las ovejas y les demandó sacrificio para que él tenga fuerza y así pueda proteger a toda la jungla. Los animales que lo acompañaron en el gobierno, empezaron a pelearse y los de su grupo, tomaron distancia, mientras que los opositores se aliaron con él, para sacar provecho.
En poco tiempo se generó un disconformismo en toda la jungla y los animales de la minoría culpaban a las ovejas del triunfo de Colmillo Negro. De pronto se tornó todo un caos y Colmillo Negro, impuso una tiranía en contra de quienes lo eligieron.